En Algo de Ricardo, un actor: Ricardo, es invitado a protagonizar Ricardo III, la emblemática obra de William Shakespeare. Él ha esperado toda la vida este momento, pero las circunstancias parecen no estar a su altura; aun así, buscará hacer lo necesario para que éste sea un montaje digno de su trayectoria.
Platicamos con el actor Ricardo Reynaud sobre su participación en este monólogo en donde actor y personaje dialogan continuamente, escrito por el uruguayo Gabriel Calderón y dirigido por Itari Marta.
¿Cómo fue tu primera aproximación con Shakespeare?
Ricardo Reynaud: Como espectador. También participé asistiendo el diseño sonoro de una puesta de Hamleten la primera compañía de teatro en la que estuve, en la Universidad Panamericana.
Hamlet era interpretado por Jaime Matarredona. Después, ya como actor cuando estudiaba en Casa del Teatro, interpreté a Macbeth en la clase del maestro José Caballero y Toño Peñúñuri.
¿Qué pensabas de Ricardo III antes de hacer este montaje?
Ricardo Reynaud: Me interesó mucho el personaje, desde la primera aproximación que tuve a cuando vi el docuficción que hizo Al Pacino, en Looking for Richard (en 1996). Después vi un montaje de Mauricio García Lozano. Leí la obra completa hasta que empezamos a montar este monólogo.
Me parecía un personaje -como muchos de los de Shakespeare-, que habla de la profundidad del ser humano, con todas sus luces y sombras. Me atraía mucho alguien torcido por dentro y por fuera, que llega a tener tanto poder, cometiendo tantas traiciones y bajezas.
¿Cómo cambió tu concepto de este personaje el hacer este monólogo?
Ricardo Reynaud: Me di cuenta de la revancha que comete un ser humano cuando ha sido despreciado de niño de formas tales. Se trastorna el ego a tal grado que decide aplastar a los demás, con tal de sobrevivir, sobresalir y ser visto.
Es un acto inconsciente de negatividad, cuando lo único que quiere es relacionarse, ser amado, abrazado, enamorarse, ser bien tratado, algo que no recibió en la infancia.
El poder se ejerce desde lo insano, el poder es una búsqueda natural de placer, el poder es una fuerza que todos buscamos, pero cuando viene desde la negatividad, se convierte en una fuerza destructiva brutal.
¿Consideras algo profético llamarte como el protagonista? (o solo una feliz casualidad)
Ricardo Reynaud: Una casualidad profética, porque he buscado conscientemente ese tipo de protagonismo.
¿Cuál ha sido el principal reto de este montaje?
Ricardo Reynaud: Estar todo ese tiempo en escena solo el público y yo, y que resulte interesante en todo momento. Ése es, y sigue siendo, el mayor reto.
Después ha habido todo tipo de desafíos, como los que conlleva cualquier montaje de teatro.
¿Cómo fue el proceso de ensayos y montaje junto a Itari?
Ricardo Reynaud: Divertidísimo, interesante, profundo, difícil. Nos tuvimos paciencia, fue muy creativo, con muchas charlas, de mucho desmadre, desesperados por momentos; muchas cosas. En resumen, muy rico y expansivo.
¿Por qué te gustaría que el público vaya a Algo de Ricardo?
Ricardo Reynaud: Porque se van a divertir mucho, se van a espejear y algo les va a cambiar en la mirada.
Agéndala
Algo de Ricardo. Jueves 20:30 horas. Foro Shakespeare (Zamora 7, Colonia Condesa, CDMX)
Hasta el 20 de abril.