21.3 C
Mexico City

La importancia del Consentimiento, entrevista con Adriana Llabrés y Alfonso Borbolla

Fotos: Alfredo Millan

Must read

Una mujer: Gina, declara que fue violada la noche del funeral de su hermana, mientras el acusado sostiene que ella dio su consentimiento. Max (abogado defensor del caso) está casado con Karen. Sus amigos, Alex y Rita, se están separando. Max y Katty le presentan al fiscal del caso: Toni (Alfonso Borbolla) a la actriz Sandra (Adriana Llabrés), quien, a su vez, está estudiando para interpretar a Medea. Tras este encuentro, todas las relaciones se cimbran en Consentimiento, obra de Nina Raine estrenada en Londres y que actualmente se presenta en el Teatro Helénico.

Foto: Alfredo Millan

Entrevistamos a Adriana Llabrés y Alfonso Borbolla para saber más de este proyecto dirigido por Enrique Singer y producida por Incidente Teatro, la productora de Marina de Tavira y Singer.

 Adriana, ¿Qué te hace seguir regresando al teatro? Sobre todo después de combinarlo con proyectos de TV. ¿Qué te llama de nuevo a regresar a los escenarios? 

Adriana: Un amigo después del estreno me dijo qué hay un brillo en mi mirada cuando hago teatro. Y es que aunque me divierto mucho haciendo tele y cine, en el teatro puedo crear un universo completo. Antes del estreno, Enrique Singer nos recordó a los griegos y que esas conexiones nos hacen sentir que estamos tocándole la mano a una parte de la humanidad, que encuentra alegría en abstraer la realidad para divertirse y con suerte menear ideas y conciencias; las propias y las ajenas… Y de una manera técnica creo que también me divierto más con la audiencia en vivo, es como tener una conversación.

Hay una libertad de exploración y de juego con el trazo, el cuerpo y la voz con lo que me siento un poco limitada en TV o cine. Y aunque me encantan y seguiré explorando esos formatos, sí creo que soy de teatro y el teatro me quiere como yo a él.

¿Cuál fue la primera impresión que te llevaste de Consentimiento y por qué quisiste hacerla?

Adriana: La vi en Londres cuándo estaba haciendo una obra allá. Me gustó que no fuera obvia hacia qué es lo que está bien o está mal. Me gusta que sean personajes con vicios, lo cual los hace más reales. Todos están lastimados y todos lastiman. 

Y el tema de la justicia… cuando les falla el sistema, recurren a la forma más arcaica de la justicia: el ojo por ojo. Es un textazo. Las escenas son redonditas y todos los personajes tienen arco. 

Obviamente también trabajar de nuevo con Enrique y este elenco jugaron una parte importante en mi decisión. 

Poncho: Lo primero que pensé es que era muy inteligente. Es una obra que busca hacer pensar al espectador, más que hacerlo sentir; y para lograrlo, los personajes tienen argumentos muy poderosos para defender sus puntos de vista. Esto hace que el público esté con uno y luego con otro y regrese, y así la autora va consiguiendo que el espectador se acerque de manera compleja al conflicto y a los temas de la obra: la justicia, la empatía, el perdón o la venganza.

En esta obra hacen mancuerna con un gran elenco, ¿Cómo ha sido su trabajo en equipo y con Singer?

Foto: Alfredo Millan

Adriana: Singer y yo somos muy cercanos, y es alguien con quien compartimos nuestros procesos creativos mientras estamos en ellos. Trabajé con él en A puerta cerrada y tenemos varios otros en la mira. Es una persona a la cual quiero y admiro mucho. Alguien con quien puedo crear y confiar que entre los dos potenciamos las propuestas del otro. Me siento cuidada y libre.

A Marina llevo años admirándola. Ese monólogo de La Mujer justa, que duraba ocho minutos, vive en mi mente y pienso en él seguido. Tenía muchas ganas de verla a los ojos y jugar con ella. Ha sido un proceso hermosísimo y no me queda duda de que tiene que ver con su generosidad, elegancia y en general su buena onda. 

Poncho: Ha sido tremendamente placentero. No había trabajado realmente con ninguno y el proceso fue muy bonito. Son tod@s uno grandes profesionales del teatro que me ayudaron a sentirme bienvenido desde el día uno. Siempre valoraron y respetaron los puntos de vista del resto, porque saben que con eso es con lo que trabajamos los actores: con nuestras perspectivas, con nuestro pasado y con nuestros sentimientos. Ha sido un proceso realmente fluido, cálido y amoroso; cosa que me parece fundamental para abordar este texto tan duro.

Poncho, ¿cómo defines a Tony y qué has encontrado en este personaje?

Poncho: Yo veo a Tony como un hombre superado por el sistema. Con ganas de cambiar la realidad pero abatido por la corrupción y lo frío y pragmático de su profesión. Como abogado, en el universo de la obra, su sensibilidad es una debilidad; sin embargo no se salva de caer en este juego enfermo y competitivo en el que “el fin justifica los medios”.

¿Cuál es el momento que más te gusta de la obra y por qué

Foto: Alfredo Millan

Poncho: Uf, qué difícil pregunta. Sería tal vez mi escena con Marina. Es un momento donde están sucediendo muchas cosas dentro del personaje: miedo de un fantasma, nervio de estar a solas con una mujer que le encanta y placer de estar gestando una venganza. Las palabras dicen una cosa y las acciones otra. Además es una escena muy íntima, es bonito cuando tratas de traer al espectador de la última fila a sentir que está sentado junto a ti en un sillón.

Adriana, ¿Cómo defines a Sandra y qué has encontrado en este personaje?

Adriana: Defino a Sandra como una chava amigable, ambiciosa, divertida, guapa y coqueta. Aunque Sandra quiere mucho a Katty, también le tiene envidia, pues no considera justo que eso que le cuesta tanto conseguir no sea valorado por su amiga de la manera en la que ella lo valoraría. Claro… creo que a Sandra le hace falta información de lo que realmente está pasando. 

En una de tus escenas más padres tu personaje está intentando aprender del mundo de los abogados precisamente hablando con dos de ellos, ¿cómo te gusta a ti prepararte para los papeles? 

Adriana: Para este proyecto, por ejemplo, me he informado sobre lo que es la justicia. Cada proyecto es distinto pero generalmente me gusta llenarme de información sobre los temas que tocan los proyectos. Aquí he estado leyendo “Justicia” de Sandel. Me lo recomendó mi sobrina Ana Paola, que es abogada. Le pedí que me ayudara a unir a los griegos, la filosofía y el tema de justicia y este libro tiene justo eso. 

Una de mis partes favoritas en estos procesos son la investigación. Comprender qué representa cada uno en un microcosmos de algo mucho más grande que nosotros, en un sistema entero, hace más fácil mi trabajo. Entonces sé para qué lucha mi personaje, no solo en la obra sino en el mundo. 

En la conferencia les preguntaba sobre la importancia de reforzar una educación sexual basada en consentimiento, una cultura en la que no solo entre extraños, sino entre parejas y matrimonios siempre haya este acuerdo, ¿qué les gustaría que dejara esta obra precisamente sobre la importancia del consentimiento? 

Adriana: Me parece que algo muy virtuoso de esta obra es que no solo habla del consentimiento como algo sexual. Creo que mientras más nos respetamos y comprendemos el consentimiento cuando alguien diga que “no” a una bebida, a una salida, y haya respeto y honor al “no”, se traslada a todas partes, incluyendo la sexual. 

Poncho: Me gustaría que la gente salga a hablar del tema. Que lo discuta con su familia, con su pareja, en su trabajo o escuela. Que se aborde el tema desde su complejidad porque hay muchos grises en las relaciones humanas. Es imposible medir todo con la misma vara.

 ¿Cuáles son sus próximos proyectos y cómo cerrarán este 2023?

Foto: Alfredo Millan

Adriana: Desde hace siete, ocho años Luis Salinas y yo hemos luchado por levantar un proyecto que por fin filmamos el año pasado. María Ayub e Inna Payán son productoras también. 

Ha sido uno de mis intereses hacer más cine y contribuir en llevar la obra de artistas cuyo trabajo se proyecta más en teatro al cine. ¡La película se va al festival de Morelia entre otros festivales muy importantes! Estamos muy contentos. El proyecto se llama Todo el Silencio la protagonizo junto con la maravillosa Ludwika Paleta y dirige mi queridísimo Diego del Río. 

Poncho: Empiezo a grabar una película terminando Consentimiento y en octubre estreno la segunda temporada de Harina en Prime video y otra serie nueva que se llama Ojitos de Huevo en Netflix. ¡Quedaron increíbles! No se las pierdan.

Finalmente ¿por qué les gustaría que el público vaya a ver Consentimiento?

Adriana: Es tan efímero todo y de repente llega una obra que no alecciona, pero que te hace verte a ti mismo y a tu entorno de una manera poderosa. Cuestionarte lo que es justo, ¿cómo luchas por tu propia justicia?, ¿a quién le haces daño cuando lo haces…? Me parecen preguntas importantes qué aún por el simple ejercicio, nos pueden hacer crecer como sociedad. Pero sobre todo, creo que la van a pasar muy bien y la temporada solamente dura cinco semanas, así que igual y solo por no decir que se la perdieron, ¡vengan a verla! 

Poncho: Creo que en estos tiempos en donde la expresión tiene que sintetizarse en una foto, en un video de 3 minutos o en 280 caracteres, esta obra viene a recordarnos que la experiencia humana es vasta, compleja, está llena de particularidades y contradicciones y así es como debemos tratar de entendernos los unos a los otros.

Agéndala

Consentimiento. Teatro Helénico (Av. Revolución 1500, Guadalupe Inn, Álvaro Obregón, CDMX). Jueves y Viernes, 20:00; Sábado 19:00 y Domingo, 18:00 horas. Hasta el 1 de octubre. Se recomienda comprar boletos con anticipación.

- Advertisement -spot_img

More articles

- Advertisement -spot_img

Latest article

error: Contenido con Derechos Aurorales !!
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para su correcto funcionamiento y para fines analíticos. Contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas que podrás aceptar o no cuando accedas a ellos. Al hacer clic en el botón Aceptar, acepta el uso de estas tecnologías y el procesamiento de tus datos para estos propósitos. Configurar y más información
Privacidad